La producción de materiales a base de madera implica cortar la madera en trozos pequeños, que luego adquieren nuevas formas, generalmente utilizando un aglutinante. Esto hace posible transformar la madera irregular en un material uniforme que es adecuado para una gran cantidad de aplicaciones.
La tecnología de laminado se basa en los tableros de fibra de alta densidad (HDF, por sus siglas en inglés). Se trata de un material a base de madera que consta de fibras de madera empapadas en adhesivo y presionadas juntas bajo calor con una compresión muy alta (más de 800 kg por metro cúbico). A continuación, se presiona sobre la superficie un atractivo papel decorativo que ha sido protegido contra daños mecánicos con una película elástica y resistente a la abrasión. Una película compacta y fina en la parte inferior también sirve para proteger el núcleo de madera contra la humedad.
El OSB (siglas en inglés de “tablero de fibras orientadas”) de alta tecnología, también conocido como tablero de obleas, está hecho de tiras de madera largas y estrechas. Estas tiras están dispuestas transversalmente, con dos capas superiores y una capa intermedia, para ofrecer un nivel excepcionalmente alto de resistencia a la flexión.
En la decoración sincronizada el impacto visual y el efecto de relieve se combinan para crear un resultado que es prácticamente idéntico a la madera maciza.